Quién quiere casarse con mi hijo: Viaje romántico con las madres. Junto a las decisiones finales, son sin duda uno de los mejores momentos del programa de Cuatro. Concursantes, pretendientes y madres han cogido las maletas y se han ido juntos de luna de miel. El grupo de Isidoro visitó Benidorm donde vivió una situación subrealista; Javier y su madre viajaron hasta la isla de Ibiza, aunque se llevó una ingrata sorpresa con una de las candidatas; Pedro y Mary nos brindaron momentos geniales con su autocaravana rumbo a Marbella; Gabi y Toñi estuvieron en La Rioja y por último, los mellizos junto a Paqui marcharon a un hotel rural en Asturias. En esta ocasión todos los trospidos han realizado sus viajes por España, la crisis manda.
La segunda edición de Quién quiere casarse con mi hijo llega a su fase decisiva. Antes de que los concursantes tomen una decisión, eso sí, siempre bajo el auspicio de su madre, tienen que conocer a las pretendientas. Y después de que la semana pasada se produjeran las primeras expulsiones, ayer pudimos ver cómo los novios se iban de luna de miel. Por supuesto, con su madre y con las candidatas. Unos viajes románticos que produjeron un sinfín de anécdotas y alguna polémica.
Pedriño y Mari
Madre e hijo gallegos son originales y divertidos hasta para elegir su destino y su medio de trasporte. El homosexual y su progenitora se fueron hasta Marbella, pero lo curioso es que lo hicieron en una caravana, a la que bautizaron como ‘marifurgo’. Eso sí, desde tierras de Julián Muñoz, Pedriño se acercó hasta Tarifa con sus dos pretendientes. Allí obtuvo más datos de ellos. Sabe que Ángel, aunque parece que va de duro, en realidad es estrecho, a la hora de las relaciones sexuales. Además ha averiguado todos los trucos que Manu emplea cuando graba películas porno. En tierras gaditanas, Pedro y Manu vivieron momentos muy románticos, como por ejemplo, ir a darse unos baños de barro, donde se cogieron la mano y posteriormente durmieron una siesta. Todo esto ante la atenta mirada de Mary, que con su tradicional sorna, decía “me habéis traído a Tarifa porque hay muchos mariquitas”.
Luis Carlos, Álvaro y Paqui
Mal van las cosas para los gemelos del programa. Y es que Paqui demuestra cada semana que en su vida manda ella y que será ella quien tenga la última palabra a la hora de decidir. Una casa rural de Asturias ha sido el escenario elegido para que los hermanos busquen su amor. Todos sabemos que Miriam es la favorita de Luis Carlos, pero también que su madre hará todo lo posible para que ella no sea la elegida. Mientras sus dos hijos pasaban un día a caballo con Elena y Sara, la madre cogió por banda a Miriam y la cantó las 40. “La guerra Paqui Miriam creo que la voy a ganar yo”, afirmó la progenitora.
Gabi y Toñi
Gabi, en tierras riojanas, eligió a Priscila para pasar un día agradable. Algo que sentó muy mal a Patricia, que no paraba de llorar porque se veía ya fuera de la vida del guapo joven. Sin embargo, apareció en escena la madre y Toñi se puso de su lado y planeó una estrategia para que Priscila acabara por desaparecer. En la cita de por la noche, el príncipe fue a saco con la rubia. “Cómo pretendes que duerma yo tranquilo con ese pijama?” dijo él; “Este niño está salido hoy”, dijo ella. Todo esto lo oyó detrás de la puerta Patricia, que al día siguiente intentó no hacerle ni caso, pero acabó también sucumbiendo.
Isidoro y Dolores
Benidorm, la tierra preferida de Belén Esteban, fue el escenario elegido por Isidoro y Dolores para pasar sus días más románticos. Mientras la mamá disfrutaba de la ciudad levantina, Isidoro pensaba cómo aprovechar su habitación. Primero llevó a Alexandra, quien le dedicó un inesperado baile erótico pero nada más, le dejó con las ganas. Y luego llegó Natalia quien, tras unos besos, se marchaba dejando plantado, una vez más, al soltero, que parecer ser que no tiene suerte con las pretendientas.
Javi y Isabel
Menuda la que se armó con las parejas de Javi. Sara harta de los tonteos del concursante con Rocío decidió marcharse. En el desayuno con su madre se dio cuenta de que faltaba y le llamó por teléfono. Y todo ello antes de viajar a Ibiza. “No me hace caso, pues he dicho: ahí te quedas, o vienes detrás de mí y me chupas un poco lo que toca o ahí te quedas con la tontita de la encía ancha”, afirmaba la rubia. Pero Javi no estaba dispuesto a perderla, y ramo de flores en mano llegó a la estación de autobuses para que se quedara. Al final la convenció, pero lo que no sabía es que al llegar a la isla, Javi optaría por Roció para pasar una romántica velada.
Con todos estas anécdotas transcurrió una noche muy emocionante, la próxima semana será el momento de la verdad, ya que los gustos de los candidatos tendrán que definirse. Eso sí, ahora tiene más rivales por la audiencia, desde que ayer empezara con buen pie el reallity culinario en Lasexta.
